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Programa de educación ambiental de La Alfranca

Durante el curso escolar, La Alfranca lleva a cabo un amplio programa de educación ambiental dirigido a centros educativos de infantil, primaria, secundaria, bachillerato, ciclos formativos, escuelas de adultos y universidad. Estas actividades están promovidas por la Dirección General de Educación Ambiental del Gobierno de Aragón y son de carácter gratuito. Se desarrollan como parte del programa de educación ambiental que se lleva a cabo en los Centros de Interpretación de la Red Natural de Aragón.

En especial, La Alfranca cuenta con una completa oferta educativa puesto que no solo es la puerta de entrada a la Reserva Natural Dirigida de la Reserva Natural de los Sotos y Galachos del Ebro sino que, además, alberga el Centro de Interpretación del Medio Natural de Aragón y el Centro de Interpretación de la Agricultura y el Regadío. Por ello, en esta finca agroambiental se pone a disposición de los centros educativos la posibilidad de desarrollar diferentes programas de diversa índole.

Por una parte, las actividades educativas se orientan a dar a conocer de forma práctica, participativa, didáctica e inclusiva los paisajes de la Reserva Natural, la biodiversidad que alberga y sus procesos naturales a través de la experiencia y las vivencias en plena naturaleza y en cualquier época del año. El entorno natural como escenario de aprendizaje, disfrute y reflexión. Por otra parte, el alumnado tiene la posibilidad de conocer la importancia y los valores de la agricultura así como los adecuados usos del agua que permiten hacer de ella una actividad más sostenible. En resultado, La Alfranca desarrolla programas educativos que fomentan el conocimiento y la importancia del ecosistema terrestre, la biodiversidad, la agricultura como motor de desarrollo y transformación del paisaje y el fomento de las buenas prácticas.  Todo ello de la mano de un equipo de educadores/as ambientales de larga experiencia.

DESARROLLO DE LA JORNADA

Una vez en La Alfranca, el grupo es recibido por nuestro equipo de educación ambiental tras lo que se formarán subgrupos de trabajo que se mantendrán hasta el término de la actividad. Acto seguido se realiza una presentación en la que se abordan aspectos relacionados con quienes somos y dónde nos encontramos (localización geográfica de la Alfranca y Reserva Natural), evolución histórica de la finca (origen y actualidad del lugar), y pinceladas varias sobre cómo se va a desarrollar la jornada (temporización de actividades)

Las actividades de corte ambiental se estructuran en dos partes claramente diferenciadas en las que, por un lado, se realiza una visita in situ al Espacio Natural Protegido. Allí el grupo de trabajo y siempre de la mano del equipo de educación ambiental realizan varias dinámicas para dar a conocer la singularidad del espacio natural, sirviéndose para ello de material óptico (lupas y telescopio), soportes digitales auxiliares, cuadernos de identificación y toda clase de recursos que puedan servir para alcanzar los objetivos propuestos por el centro escolar. Por otro lado, el grupo de trabajo realiza una visita a las instalaciones del centro de interpretación del medio natural de Aragón donde se recorren varias aulas con objeto de reforzar la carga didáctica. Para ello se utilizan maquetas, recursos audiovisuales, materiales biológicos, juegos varios adaptados al nivel del centro escolar.

La visita termina con el acompañamiento del grupo escolar al autobús. Los responsables del grupo reciben una bolsa con información variada y una hoja para la posterior evaluación de la actividad por parte del centro escolar.

Algunos de los tipos de programas que se desarrollan en La Alfranca son:

*Programa Educativo Estándar

*Programa PEZIS (Zonas de Influencia Socioeconómica del Espacio Natural Protegido)

*Programa Aragón, Aula Natural

El Festival Climático del Humor Ecocomedy regresa a La Alfranca en la IV edición de la Aragón Climate Week

La improvisación y los monólogos de Teatro Indigesto y Risarchers protagonizarán la segunda edición del encuentro humorístico que tendrá lugar el domingo 27 de octubre.

El Festival Climático del Humor Ecocomedy regresa por segundo año consecutivo a La Alfranca en el marco de la IV edición de la Aragón Climate Week. El evento, que tendrá lugar el domingo 27 de octubre, reunirá a rostros destacados de la escena humorística aragonesa como Encarni Corrales, JJ Sánchez y Alberto Salvador de Teatro Ingesto y a los populares Risarchers, un grupo de investigadores monologuistas de la Universidad de Zaragoza que llevan años triunfando con sus actuaciones de temática científica.

Tras el éxito de su primera edición, el Ecocomedy pretende volver a reunir a un público joven y adulto en torno a la sensibilización en la lucha contra la crisis climática. Bajo el título ‘No es broma que el clima cambie’, esta iniciativa busca, además, promover las disciplinas artísticas como vehículo de sensibilización y concienciación frente a la actual problemática medioambiental. Un evento promovido por la Dirección General de Educación Ambiental del Gobierno de Aragón que, en esta ocasión, volverá a tener como escenario un espacio histórico como es el convento de San Vicente de Paúl de La Alfranca.

El festival Ecocomedy ‘No es broma que el clima cambie’ está dirigido a mayores de 12 años y tiene un aforo limitado. Las entradas tienen un coste de 3 euros y pueden adquirirse a través de la web www.laalfranca.es

Otras actividades

Además del Ecocomedy en La Alfranca, la Aragón Climate Week también viajará a otros Centros de Interpretación de la Red Natural de Aragón. Espacios como el Parque Natural del Moncayo, el Paisaje Protegido de los Pinares de Rodeno, el Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara o el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido llevarán a cabo actividades y talleres en torno al Cambio Climático los días 25, 26 y 27 de octubre. Más información en www.rednaturaldearagon.com.

Éxito de participación en la celebración de ‘Mi primer Geolodía’ en La Alfranca

La jornada celebrada con motivo del Dia Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, el pasado 10 de febrero, contó con la participación de unos 200 jóvenes que participaron en una docena de talleres.

Éxito de participación en la celebración de ‘Mi primer Geolodía’ este fin de semana (10 de febrero) en La Alfranca con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. La jornada, organizada por la Unidad de Zaragoza del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) con la coordinación de la comisión ‘Mujeres y Geología’ de la Sociedad Geológica de España’ (SGE) reunió a unos 200 niños y niñas que participaron en una docena de actividades y talleres gratuitos sobre geología.

Con el objetivo de acercar esta rama científica al público más joven, La Alfranca —propiedad del Gobierno de Aragón—, acogió esta iniciativa divulgativa gratuita en la que participaron un buen número de geólogas e investigadoras científicas. En total, se llevaron a cabo seis talleres para diferentes edades en dos pases cada uno. Estuvieron dirigidos por Ruth Soto, Tania Mochales, Esther Izquierdo, Pilar Clariana y Cristina Pérez del IGME-CSIC; Ana Moreno del IPE-CSIC; Carmen Castañeda de EEAD-CSIC; Belén Oliva, Ana Simón, Rosibeth Toro, Norly Belandria y María Eugenia Dies de la Universidad de Zaragoza y Carlota Oliván y Alicia Cabeza.

‘Mi primer Geolodía’ es una iniciativa a nivel nacional que se desarrolla cada año en un punto del País. En esta ocasión, las organizadoras valoraron la celebración como todo un éxito no solo por la buena disposición del público sino por el éxito de participación ya que las entradas se agotaron pocas horas después de abrir las inscripciones. «Pese a que la previsión meteorológica no era del todo buena, las niñas y niños que acudieron al evento lo hicieron con muchas ganas de escuchar y aprender y fueron muy participativos y entusiastas», afirman las responsables de los talleres. Un hecho que, según cuentan, «resultó muy gratificante».

La jornada, desarrollada en un ambiente festivo y familiar, también contó con la ayuda de los educadores ambientales de La Alfranca. Destacable fue la participación de familias en la que algún miembro era geólogo y quisieron despertar el interés de los pequeños por esta rama científica.

Los más pequeños explicaron que lo que más les gustó fue poder experimentar en una «excavación paleontológica de verdad» y «construir su propia planeta Tierra». Aunque sin duda, la actividad estrella fue el scape room ‘Perfilina y el secreto de la maleta perdida’, dirigida a jóvenes entre 7 y 12 años y en la cual tuvieron que pensar y superar varias pruebas relacionadas con la geología y los suelos.